Los amantes del arte en todas sus expresiones visitaban una galería en el Museo de Arte Moderno de San Francisco donde se encontraron con una exhibición única.
Se trato de unos lentes sencillos de aumento que fueron puestos sobre el suelo.
En pocos momentos las personas se juntaron alrededor del artefacto para tratar de entender la idea del artista, pero no había ningún “artista” conceptual que reclamara la autoría del mismo.
¡Todo fue una simple broma!
La idea fue de un joven estudiante TJ Khayatan y sus compañeros de clase.
El joven decidió realizar un experimento social y pusieron los lentes en el suelo para ver cómo reaccionaba la gente.
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Y miren que respondieron muy bien, pues lo que comenzó como un chiste, terminó siendo toda una discusión sobre qué es arte y qué no.
Muchos opinaron que el arte moderno es una “estupidez” o una forma de “engañar a las personas para hacer dinero”. Mientras que otros concluyeron que el “arte irónico” también es arte.
En declaraciones a los medios de comunicación, el joven afirmó que está de acuerdo con la idea de que el arte puede ser un chiste en ocasiones, “pero que es una forma también de expresar nuestra propia creatividad.
“Unos lo interpretan como broma, otros interpretan el arte hasta espiritual”
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